EL BARCO DE CESPED
Día de reencuentros familiares, y de juegos infantiles, y también de peluquería, ¡¡por fin¡¡¡ que es que una es superjoven por dentro pero las canas de "por fuera" no hay quien las convenza de este hecho.
Ahora, me han dejado estupenda y es que mi peluquera es una artista del rejuvenecimiento.
Después a dar una vueltecita por el C.Comercial con las niñas, ¡¡hola Salud, hola Irene¡¡ Y qué locura con las dos monas, qué corren, qué gritan, qué energía¡¡¡¡ bueno que estoy un poco que me subo por las paredes con estas dos, al que quiera marcha, pero de la de verdad que se vaya con dos chicas a un centro comercial y se le quitarán las ganas de más.
Al volver acabaron jugando en un barco (caja de cartón) y pasando del resto de los juguetes, eso nos demuestra que no necesitan nada para divertirse, y a veces, nos encerramos en comprar, comprar y comprar, porque parece que siempre les faltan juguetes y ellas/os cuanto más tienen, más quieren, menos valoran y mas piden. En ese circulo vicioso los culpables somos nosotros, los padres, los adultos que pretendemos saciar una necesidad que no es material realmente es una necesidad de juego, de atención y amor y eso, tengamoslo en cuenta es gratis y nos sobra y lo único que ellos realmente agradecen de corazon.
Gracias amigos sois fantásticos.
